- Duración:
- Comensales: 4
- Dificultad: Normal
Si no te gusta demasiado la carne de cerdo, o la de ternera, prefieres mejor las carnes blancas con bajo contenido en grasas y calorías, pero te gustan las recetas en las que predomina la carne vacuna, no te preocupes, te traemos una receta de lasaña de pollo que no tiene nada que envidiarles a las lasañas tradicionales de carne. Pruébala a hacerla con nuestra fácil receta.
Ingredientes para preparar una lasaña de pollo
- 230 gramos de pasta en láminas
- 400 gramos de carne picada de pollo
- 400 gramos de tomate natural
- 200 mililitros de leche desnatada
- 140 gramos de cebolla
- 200 mililitros de caldo de pollo
- 200 gramos de champiñones
- 50 gramos de queso rayado
- 20 gramos de aceite de oliva
- 10 gramos harina
- Sal
- Perejil
- Pimienta negra
Cómo hacer lasaña de pollo
Una vez que te hemos mostrado los ingredientes de esta deliciosa receta, te enseñaremos los pasos que debes seguir para elaborarla.
Para comenzara a hacer esta receta, tendrás primero que tener todos los ingredientes en tu encimera o mesa donde suelas cocinar. Esto te agilizará todo el proceso de búsqueda de los ingredientes y no tardarás tanto en buscarlos por la despensa.
Una vez con los ingredientes a la vista, cogeremos la pasta laminada para cocerla. Lee muy bien las indicaciones que están en el paquete, ya que suelen variar según la marca que compres. Sigue dichas instrucciones y tiempo de cocción.
Cuando hayas comprobado que la pasta está al dente, ponlas en un cuenco con agua muy fría para evitar que se peguen unas a otras, o si lo prefieres ponlas en un paño húmedo sin que se toquen, ya que con el calor de la cocción pueden adherirse unas a otras y romperse cuando las vayas a utilizar.
Dejaremos aparte las láminas de pasta para proceder a hacer la salsa bechamel. Puedes encontrar la forma de hacer bechamel para lasaña en el siguiente enlace.
Cuando hayas hecho la bechamel empezaremos a cocinar la salsa de nuestra lasaña de pollo.
Tomaremos tanto la cebolla como el tomate, los pelaremos y cortaremos en trozos muy pequeños.
En una sartén grande, empezaremos a calentar aceite de oliva para agregarle una vez caliente la cebolla para pocharla.
Cuando la cebolla haya perdido su color característico y esté dorándose, agrega el tomate troceado.
Dejaremos que se haga unos minutos, y después echaremos el caldo de pollo junto con la bechamel que hemos hecho.
En el momento que empiece a hervir, incluiremos en la sartén la carne picada del pollo.
Mientras que la carne se liga a la salsa, algo que durará aproximadamente 15 minutos, aprovecharemos para limpiar bien los champiñones, los trocearemos y en una sartén aparte los sofreiremos.
Cuando todos los ingredientes estén hechos y fuera del fuego, cogeremos una fuente que habremos antes untado con mantequilla por el interior. En ella ponemos una primera capa de salsa que recubra también todas las paredes, después pondremos una capa de pasta laminada, otra capa de salsa, y después los champiñones.
Repetiremos este proceso las veces que sea necesario hasta llenar la fuente o hasta que nos quedemos sin ingredientes.
La capa superior debe ser siempre una de láminas de pasta, que cubriremos completamente con la bechamel y por encima de esta, echaremos generosamente queso rallado.
Introduciremos la lasaña en el horno, que tendremos que haber precalentado durante unos 20 minutos a una temperatura de 220ºC.
Dejaremos que se haga hasta que el queso se gratine, tomando ese color tan característico, momento en el que sacaremos del horno e iremos sirviendo a cada comensal un trozo.
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Consejos para cocinar lasaña de pollo
Como has podido ver, aunque tenga muchos pasos, esta lasaña si se sigue al dedillo es muy fácil de hacer. Aun así te vamos a dar unos consejos para que te sea más sencilla:
- A veces pelar un tomate cuesta mucho trabajo, para eso, pon una olla con agua muy caliente y sumerge los tomates durante unos segundos. Cuando los vuelvas a sacar, las pieles se habrán desprendido de la carne del tomate. A este proceso se llama escaldar.
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